CENA PASCUAL

CENA PASCUAL

Y LA EXTINCIÓN DE LAS LUCES

En Lleida hemos celebrado los Cuerpos del Supremo Consejo del Grado 33º la Cena Pascual y la Extinción de las velas. Los hermanos de los dos cuerpos así como miembros de la Logia Silenci nos hemos reunido para celebrar esta ceremonia tan significativa.



Todo masón que haya sido iniciado como Caballero Rosacruz deberá asistir obligatoriamente el jueves de Pascua, a una importante ceremonia que se realiza en memoria de la última cena que tuvo Jesús con sus discípulos. La primera referencia escrita de tal práctica se encuentra en un ritual del grado 18º que el H. Charles de Ledebat publicó en Nueva Orleáns, en el año de 1856. Con posterioridad a esta fecha, se ha difundido la costumbre de celebrarlo en el resto del mundo masónico.


Si por motivos de fuerza mayor el capítulo no pudiere celebrar la ceremonia el día jueves, deberá realizarse en fecha anterior. Igualmente si algún Caballero Rosacruz no puede asistir a la ceremonia, deberá hacerla en privado, con el mayor recogimiento del espíritu.

Esta cena no debe confundirse con la Cena Mística que sigue a la Ceremonia de Grado.

Durante la cena se comerá pan y cordero asado, y se tomará vino tinto (los HH. que no puedan ingerir alcohol tomarán jugo de uvas)

La cena se llevará a cabo en un salón adecuado, próximo a la Cámara Verde, que estará profusamente iluminado, se decorará con cortinajes rojos, abundantes rosas y hojarasca.


En oriente se colocarán la Cruz y la Rosa, de manera visible para todos los presentes. Habrá una mesa principal de trece puestos, en la que se sentaran los Soberanos Grandes Inspectores Generales, los Grandes Inspectores Generales, el Muy Sabio Maestro, los HH. Vigilantes, el Caballero de la Elocuencia, el Maestro de Despacho y los Dignatarios y Oficiales del Capítulo que hayan sido designados por el Muy Sabio Maestro hasta completar las trece plazas.

La mesa estará dispuesta preferentemente en forma de cruz latina, cubierta con manteles blancos. Habrá cubiertos, jarras (no debe haber botellas), copas para el vino y platos para el pan y el cordero. Sobre dicha mesa se colocará un candelabro de siete luces alineado sobre el eje vertical de la Cruz. Las velas deberán estar encendidas antes de que los Caballeros se sienten a la mesa.

A esta Ceremonia pueden asistir profanos.